“Vamos a tomar medidas para expresar nuestro desacuerdo con la presión política que existe en Nicaragua en este momento”, expresó el principal encargado del Departamento de Estado de EEUU para Latinoamérica, Brian Nichols
Cortesía de Infobae
El principal encargado del Departamento de Estado de EEUU para Latinoamérica, Brian Nichols, afirmó este lunes que preparan una nueva ronda de sanciones contra el régimen de Daniel Ortega, en la jornada inaugural del Foro de la Sociedad Civil dentro de la IX Cumbre de las Américas.
“Esperamos cambios profundos en su forma de actuar y si no, vamos a tomar medidas para expresar nuestro desacuerdo con la presión política que existe en Nicaragua en este momento”, expresó Nichols en declaraciones a los periodistas instantes antes de la apertura del Foro de la Sociedad Civil, en un hotel de Los Ángeles.
Desde 2018, Nicaragua atraviesa una crisis que, además de los exiliados, ha dejado al menos 355 muertos, de los cuales el régimen de Daniel Ortega ha confirmado 200, mientras que más de 180 personas permanecen encarceladas como “presos políticos”, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH).
Nicaragua ha sido uno de los tres gobiernos, junto con los de Venezuela y Cuba, que han sido excluidos de la IX Cumbre de las Américas por Estados Unidos en su condición anfitrión, al no considerarlos democráticos y no respetar los derechos humanos.
Sobre Venezuela el alto funcionario estadounidense dijo que “hay falta de libertad” y “presos políticos”, situación que es contraria a los “documentos fundamentales de la Cumbre de las Américas”.
“Esa fue nuestra preocupación. Entendemos que hay otras opiniones y pasamos mucho tiempo hablando con los demás, pensando en avanzar en esos temas, pero al final eso es lo que más pesó en nuestra decisión”, indicó Nichols.
También insistió que EEUU está dispuesto a “modificar sus políticas” hacia la nación caribeña, “si hay negociaciones de buena fe” entre el régimen de Nicolás Maduro y la oposición en México.Daniel Ortega, Nicolás Maduro y Miguel Díaz-Canel
Varios gobiernos latinoamericanos han expresado su disconformidad con excluir a esas tres naciones y algunos mandatarios, como forma de protesta, han decidido no acudir a la cumbre, como el boliviano Luis Arce y el mexicano Andrés Manuel López Obrador, quien dio a conocer su negativa este mismo lunes.
La IX Cumbre de las Américas se celebra en la ciudad californiana de Los Ángeles hasta el próximo viernes, aunque las sesiones plenarias con los líderes regionales se desarrollarán solo a partir del jueves, según la programación del Departamento de Estado de EEUU.
Esta es la primera vez que Estados Unidos acoge la cita continental desde su primera edición, que tuvo lugar en 1994, en Miami, durante el Gobierno de Bill Clinton.
EEUU ya había sido tajante con respecto a Venezuela y Nicaragua, a los que decidió excluir de la lista de países invitados. Sin embargo, Washington se había mostrado menos directo con Cuba, pese a que en las últimas semanas había retomado los contactos con La Habana sobre migración y había retirado algunas sanciones a Caracas para facilitar el diálogo con la oposición.
En todo caso, el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, descartó su participación hace dos semanas al asegurar que “en ningún caso” participaría en la cumbre.
Los líderes de Cuba, Venezuela y Nicaragua convocaron a finales de mayo por sorpresa una reunión de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), de la que son sus principales integrantes, para sacar pecho por su exclusión de la Cumbre en un gesto de desafío a Estados Unidos.
Uno de los mayores objetivos de EEUU en la cumbre es lograr un acuerdo migratorio para hacer frente a los desafíos que enfrenta la región.
(Con información de EFE)