The New York Times/Cortesía tomado de Infobae
Ayudar a Rusia en la guerra es una oportunidad para que Corea del Norte pruebe sus nuevas armas, y los funcionarios ucranianos afirman que las tropas norcoreanas están adquiriendo experiencia directa en batalla
Fotografía del encuentro en junio pasado en Pyongyang del presidente de Rusia, Vladímir Putin, y el líder de Corea del Norte, Kim Jong-un. (EFE/EPA/KRISTINA KORMILITSYNA)
La guerra en Ucrania está proporcionando al ejército de Corea del Norte algo que esperaba desde hace tiempo: oportunidades para probar sus nuevas armas y la preparación de sus oficiales para la guerra moderna, dijeron el miércoles analistas y funcionarios en Corea del Sur.
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En las últimas semanas, funcionarios ucranianos, entre ellos el presidente Volodimir Zelenski, han declarado que, además de suministrar grandes cargamentos de proyectiles de artillería y misiles balísticos para Rusia, Corea del Norte ha estado enviando ingenieros militares y soldados para luchar junto a las tropas rusas. La semana pasada, Kim Yong-hyun, ministro de Defensa de Corea del Sur, dijo que era “muy probable” que varios soldados norcoreanos hubieran muerto ya en los combates, y que Corea del Norte enviaría más tropas para ayudar a Rusia.
Moscú ayudó a Corea del Norte a combatir en la Guerra de Corea hace siete décadas suministrándole armas y pilotos. Ahora, la ayuda del Norte a Rusia en una guerra lejana está dando la vuelta a la historia. Además, según los analistas, está reforzando su preparación militar en la península coreana en un momento de crecientes tensiones con Corea del Sur.
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Desde la Guerra de Corea, Corea del Norte no ha vuelto a librar otro conflicto importante. Pero ha buscado oportunidades para vender armas y otro tipo de ayuda militar a países amigos. Envió pilotos para ayudar a Vietnam del Norte durante la guerra de Vietnam. Sus pilotos también volaron para Egipto en la Guerra del Yom Kippur de 1973. Corea del Norte también envió técnicos de misiles y, según Tass, la agencia estatal de noticias rusa, dos pequeñas unidades de tropas de combate para luchar por el régimen de Assad durante la guerra civil de Siria en 2016.
“Ha sido un patrón: Cuando Corea del Norte ha vendido armas a países en guerra, ha enviado personal no sólo para ayudar a esos países a utilizar las armas, sino a menudo también para luchar allí ellos mismos”, dijo Yang Uk, experto militar del Instituto Asan de Estudios Políticos de Seúl. “Parece que no les gusta perder la oportunidad de luchar en una guerra y adquirir experiencia”.
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Si Corea del Norte enviara tropas terrestres a Ucrania, sería “su primera guerra importante en décadas, una oportunidad en la que sus oficiales podrían obtener una muestra de cómo se libra una guerra moderna, incluido el uso de drones”, añadió Yang. “Estudiarán cómo los conocimientos que adquieran allí pueden trasladarse al teatro de operaciones coreano”.
Foto de archivo: Restos de un misil que se cree que fue fabricado en Corea del Norte y que impactó en Kharkiv, Ucrania, en enero. (REUTERS/Vyacheslav Madiyevskyy)
Ni Ucrania ni Corea del Sur han presentado pruebas de la presencia de tropas norcoreanas. El secretario general de la OTAN, Mark Rutte, declaró el miércoles que la alianza no disponía de información definitiva sobre esa posibilidad.
Funcionarios militares y de inteligencia estadounidenses expresaron cierto escepticismo ante las afirmaciones ucranianas de que mercenarios norcoreanos combatían ahora, en número significativo, contra las fuerzas ucranianas. Pero afirmaron que tenían pocas dudas de que ingenieros y observadores norcoreanos están en Rusia y partes de Ucrania, en parte para construir y operar los misiles balísticos de fabricación norcoreana que Rusia ha comprado.
Ha habido informes no confirmados de norcoreanos muertos en ataques ucranianos. Pero los funcionarios estadounidenses dijeron que se trataba de reclutas. Un funcionario dijo que no les sorprendería que Corea del Norte enviara tropas -para entrenar y quizá para combatir-, pero que aún no tenían pruebas.
Washington ha advertido en repetidas ocasiones de la creciente cooperación militar entre Rusia y Corea del Norte, aportando pruebas fotográficas de que armas procedentes de Corea del Norte, especialmente sus misiles balísticos de corto alcance KN-23, se han utilizado contra Ucrania.
El KN-23 forma parte de una serie de misiles balísticos de corto alcance con capacidad nuclear que Corea del Norte ha desarrollado y probado en los últimos años. Sería una de las principales armas que Corea del Norte utilizaría contra Corea del Sur si estallara una guerra en la península coreana, según los expertos militares.
“Del uso en el campo de batalla, Corea del Norte obtendrá datos valiosos para mejorar la eficacia de sus misiles, datos que también puede utilizar para ayudar a vender los misiles a compradores extranjeros”, afirmó Yang Moo-jin, presidente de la Universidad de Estudios Norcoreanos de Seúl.El líder norcoreano Kim Jong Un apunta con un arma mientras visita la base de entrenamiento de la fuerza armada de operaciones especiales del ejército de Corea del Norte en un lugar no revelado. (Agencia Central de Noticias de Corea/KCNA vía REUTERS)
Los analistas de Corea del Sur afirmaron que la principal aportación de personal norcoreano a la guerra rusa consistiría en ingenieros y asesores de armamento para ayudar a los militares rusos a manejar sus armas, observar defectos y recoger datos de su uso en el campo de batalla. Se dice que muchos de los proyectiles de artillería y misiles norcoreanos son de mala calidad y resultan ser inútiles.
Algunos analistas dudan de que Corea del Norte vaya a comprometer pronto un gran número de tropas en la guerra de Ucrania.
“Ese tipo de operación requiere amplios preparativos por ambas partes, como los ejercicios militares anuales que realizan Corea del Sur y Estados Unidos”, afirmó Park Won-gon, politólogo de la Universidad Ewha Womans de Seúl.
Se cree que Corea del Norte ha enviado miles de contenedores con proyectiles de artillería, misiles y otras armas a Rusia desde la invasión de Ucrania por Moscú en 2022, según funcionarios estadounidenses y surcoreanos. A cambio, Corea del Norte puede buscar la ayuda tecnológica de Rusia para sus programas nucleares y espaciales, así como oportunidades para enviar a sus trabajadores a ayudar a reconstruir las regiones ocupadas por Rusia en Ucrania y traer a casa los ingresos que necesitan con urgencia, dijeron.
En virtud de las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, los países tienen prohibido emplear a trabajadores norcoreanos o participar en el comercio de armas con el Norte.
Miembros del ejército marchan con una bandera nacional surcoreana durante un desfile militar con motivo del 76 aniversario del día de las fuerzas armadas en Seúl. (REUTERS/Kim Soo-hyeon)
Tanto Moscú como Pyongyang han negado que se produzcan envíos de armas desde Corea del Norte. Rusia también calificó los informes de que tropas norcoreanas combatían junto a sus tropas como “otra noticia falsa”. En las últimas semanas, funcionarios y medios de comunicación ucranianos han difundido cada vez más acusaciones de este tipo, sin aportar pruebas fotográficas ni de otro tipo.
“Vemos una alianza cada vez mayor entre Rusia y regímenes como Corea del Norte”, declaró Zelenski el domingo. “Ya no se trata sólo de transferir armas. En realidad se trata de transferir personas de Corea del Norte a las fuerzas militares de ocupación”.
A medida que Corea del Norte ha alimentado su asociación con Rusia, también se ha vuelto cada vez más hostil hacia Corea del Sur, demoliendo todas las conexiones ferroviarias y por carretera entre las dos Coreas con dinamitas esta semana en un gesto simbólico de declarar al Sur como un estado enemigo.
“La sensación de estar aliada con Rusia puede envalentonar a Corea del Norte para volverse más agresiva con Corea del Sur”, afirmó Park.
