Por Mathias Rivera/La Edición
San Salvador.-Una guerra sin precedentes contra la delincuencia en El Salvador mantiene el Gobierno con el propósito de generar seguridad y tranquilidad a la población.
La estrategia de seguridad implementada se llama Plan Control Territorial, con la cual se ha fortalecido la operatividad de la Policía Nacional Civil (PNC).
Como resultado de ello, los policías han logrado incautar más de 3,500 armas de diferente calibre, desde el inicio la gestión del Presidente Bukele.
“Recientemente le dimos un duro golpe a un político traficante de armas. Lamentablemente la “justicia” de este país lo ha dejado suelto.
¿Quién sabe si algunas de estas armas decomisadas pasaron por sus manos? ¿Quién sabe cuánto daño pudieron haber hecho al país y a la gente?”, dijo el ministro de Justicia y Seguridad, Rogelio Rivas, en relación al proceso judicial iniciado en contra de los exministros de la Defensa Nacional, David Munguía Payés (actos arbitrarios, peculado, falsedad documental agravada) y José Atilio Benítez (Peculado), además contra el expresidente del partido ARENA, Carlos Gustavo Roberto López Davidson (Cómplice no necesario en el delito de peculado), y otros dos militares.
Las cifras entre el 1 de enero al 21 de agosto contabilizan 1,671 armas decomisadas. La Policía ha destacado un aumento en la incautación de armas automáticas.
