Cortesía/La Edición
El Gobierno mantiene un monitoreo técnico en el volcán Chaparrastique, de San Miguel, ante la actividad volcánica recurrente registrada en este año. El objetivo es estar prevenidos ante una emergencia natural, para reaccionar de una forma eficaz e inmediata.
A través del Sistema Nacional de Protección Civil y del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) se mantiene el referido monitoreo de la actividad en el coloso.
El volcán de San Miguel no presenta, al menos en estos días, ningún riesgo de erupción, sin embargo, es importante el monitoreo constante las 24 horas.
Gracias al trabajo que ejecuta el Gobierno, en la prevención de daños por riesgos naturales, existe un protocolo establecido en los municipios aledaños, en los que se mantiene personal técnico de Protección Civil para poder atender cualquier eventualidad que pueda suceder en la zona.
Debido a que el volcán de San Miguel está activo y en algunas ocasiones ha presentado episodios de lanzamiento de cenizas, no se recomienda el turismo ni senderismo en su cráter.
El macizo volcánico no tiene un sendero turístico, se ingresa por propiedades privadas, por lo que el riesgo se incrementa para las personas que se aventuran a escalar a la cima.
Los parámetros de sismicidad registrados por las estaciones ubicadas en los alrededores del volcán de San Miguel y las emisiones de dióxido de azufre, medidas por la estación Ranchito, se han mantenido bajas.
Sin embargo, el Chaparrastique, es el volcán con mayor actividad del país y es considerado de tipo “conducto abierto”, por lo que ocasionalmente presenta cambios o incrementos repentinos en su actividad.
Estos periodos de incrementos en la actividad interna pueden manifestarse con episodios de emanaciones de gases y cenizas, pero siempre están siendo monitoreados por vulcanólogos del MARN.
